El desarrollo del escudo antimisiles de la OTAN avanza a buen ritmo: con un coste aproximado de 800 millones de dólares, se acaba de inaugurar en Deveslu otra pieza más del sistema anti-misiles que EEUU está desplegando en la frontera oriental de Europa.
Este sistema antimisiles es, según EEUU, una garantía de seguridad dirigida a evitar ataques con misiles de corto y medio alcance, orientado más para la defensa contra las armas de países como Irán que para la defensa contra Rusia (ya que, ante el arsenal ruso, estos sistemas son insuficientes). De todos modos, la realidad es que la presencia del escudo antimisiles está generando una gran escalada de tensión entre Rusia y EEUU.
Según Rusia, el escudo viola los tratados de no proliferación y de desarme firmados durante la Guerra Fría ya que existe la posibilidad de armar los misiles de las plataformas con ojivas nucleares, así como la posibilidad de cambiar los sistemas para convertirlos en elementos de ataque.
Independientemente de las acusaciones rusas y sin valorar si la amenaza de EEUU es real, lo cierto es que la instalación del escudo tiene ciertas implicaciones en materia de estrategia y seguridad que ponen en jaque a Rusia:
- La instalación de los sistemas de radar Aegis suponen la monitorización del espacio aéreo ruso lo que permite recabar datos de inteligencia acerca de la aviación rusa a la OTAN.
- La instalación de las plataformas antimisiles reduce la capacidad disuasoria nuclear de Rusia, si bien es cierto que no son suficientes como para detener un ataque masivo, también lo es que ofrecen una ventaja a la OTAN que pone en riesgo el delicado equilibrio basado en la disuasión que perdura en el continente.
- La instalación de estas plataformas es percibida como una amenaza militar directa para Rusia, que actualmente no tiene el músculo económico suficiente como para desarrollar un escudo paralelo, lo que les ha llevado a centrarse en mejorar sus sistemas de ataque y en desarrollar armamento nuclear capaz de violar los sistemas del escudo.
El escudo antimisiles llega a Europa en pleno auge internacional de Rusia, que no parece dispuesta a permitir que su influencia en la zona se vea afectada por la actividad de la OTAN, actividad que precisamente puede estar propiciando un cambio en el tenso equilibrio europeo: se está produciendo un rearme.
Al mismo tiempo que la OTAN se empeña en avanzar su escudo antimisiles, Rusia anuncia la mejora de sus antiguos ICBM (como el A-135 Amur), la creación de nuevos prototipos y el encargo de bombarderos de largo alcance (Tu-122) con capacidad nuclear. Todo ello acompañado del refuerzo americano de divisiones blindadas en Centroeuropa y el respectivo refuerzo ruso de su flota del mar negro. En definitiva, todos los datos indican que Europa se está rearmando, y quizás estemos camino de ser otra vez un peón en una nueva Guerra Fría.
NATO’s anti-ballistic missile shield development is making good progress: costing above 800 million dollars, another piece of the shield that USA is building in western Europe border has been finished.
This system, according to USA, is a security guarantee aimed to avoid short and medium range missile attacks from countries like Iran rather than Russia (because Russian arsenal is much more powerful than this system can handle). Anyway, the fact is that this shield I causing a tension escalade between USA and Russia.
According to Russian Government, this shield violates all the non-proliferation and disarming agreements signed during the Cold War as it is possible to install nuclear warheads in those missiles, added to the possibility of changing the purpose of the system to an attack weapon.
Not considering the Russian accusations, and not valuing if the USA threat is real or not, the fact is that the installation of the shield has some strategical and defensive implications that put Russia in a difficult situation:
- The Aegis radar systems can monitor the Russian airspace, what allows NATO intelligence obtaining from Russian aviation.
- These systems cut the nuclear dissuasion capability of Russia, giving NATO a clear advantage which can put in risk the fragile equilibrium based in that dissuasion.
- The installation of these platforms is seen by Russia as a direct military threat, which nowadays hasn’t enough economic power to develop a parallel shield. This fact brought them to focus on developing their attack systems and new nuclear weapons capable to pierce the shield.
The shield comes to Europe in the middle of a new Russian supremacy, which doesn’t seem to permit that its influence in the area be affected by NATO activity, activity which could be contributing a change in the tense equilibrium of Europe: It is producing a rearming.
While NATO persist in develop the shield, Russia announce the improvement of its old ICBMs (as A-135 Amur), the creation of new prototypes and the ordering of new long-range nuclear bombers (Tu-122). All accompanied by the American reinforcement in Middle Europe and the consequent Russian reinforcing of the Black Sea Army. As conclusion, all the information indicate that Europe is being rearmed, and maybe we are on the way to be a pawn again in a new Cold War.
FERNANDO LAMAS MORENO
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