HOJA DE RUTA: ACUERDO DE SEGURIDAD Y PROCESO POLÍTICO EN UCRANIA/ Roadmap: Security agreement and political process in Ukraine

Se han calculado unas 9.600 muertes desde el 2014[1] por los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales de Kiev y las fuerzas separatistas rebeldes tras la proclamación de dos repúblicas populares en Donestsk y Lugansk con la dimisión del anterior presidente, Viktor Yanukovich, y la proclamación de un gobierno más próximo a Europa. El alto al fuego firmado en Minsk en febrero del 2015 redujo las bajas y el despliegue de armas pesadas, pero no logró su objetivo pacificador ante la imposibilidad de su cumplimiento por parte de Kiev y Moscú[2]. Una vez más, se intenta avanzar en el proceso de paz y, por eso, el día 19 de octubre el Cuarteto de Normandía (Francia, Alemania, Rusia y Ucrania) se ha vuelto a reunir -esta vez en Berlín- para hablar sobre el conflicto en Ucrania para buscar una serie de medidas y llegar a un acuerdo sobre el este de Ucrania.

El Cuarteto ha decidido firmar una “Hoja de Ruta” para antes de diciembre sobre los Acuerdos de Minsk, un documento que ratifique el intento de avance propuesto en Bielorrusia para abordar una solución político-militar del conflicto en Ucrania del este; los puntos fundamentales a afrontar y siguiendo un orden primordial donde la seguridad será lo principal antes del proceso político, serán los controles fronterizos, líneas de contacto, accesos de la OSCE y el inicio del desarme[3]. En el encuentro se ha puntualizado el papel de la OSCE como intermediaria y actor principal en esta crisis (presente también a través del Grupo de Contacto Trilateral conjuntamente con Rusia y Ucrania) con la ratificación del despliegue de una misión de Policía armada. Se continuará además con los trabajos a nivel experto y los subgrupos de trabajo (Grupo de Contacto) para el proceso legislativo y la aplicación de la “fórmula Steinmeier”[4] para establecer un status especial en esa parte del país con una mayor autonomía[5].

El resultado de esta reunión, sin embargo, deja algo más confusa, si cabe, la postura de Putin con respecto a la solución del conflicto en Ucrania. Putin no había vuelto a pisar territorio alemán desde la anexión de Crimea en el 2014 y, tras eso, se alimentó el distanciamiento entre Rusia y Occidente debido a las sanciones económicas alemanas hacia Rusia, dejando bastante frías y disonantes las relaciones entre ambas partes. Pero la iniciativa de Merkel de poner el tema sobre la mesa con los principales líderes involucrados en el conflicto ucraniano ha puesto en evidencia lo importante que es dejar de lado esa política de distensión, algo que Putin se ha pensado mucho -hasta el punto de confirmar su participación en el encuentro casi el día antes.

Actualmente, Putin se encuentra muy condicionado por lo que sucede en Siria y las decisiones que tome en relación al asunto de Ucrania y sus relaciones con el resto de líderes europeos dependerá del avance político en la guerra siria. Con su presencia en el debate acerca del conflicto ucraniano, hasta ahora silenciado -de forma voluntaria o involuntaria- por los acontecimientos en Siria, Putin puede estar buscando una salida a su exceso de protagonismo en Oriente Medio para desviar la atención, de nuevo, hacia la parte oriental europea mientras el devenir político en Siria sigue la trayectoria más compleja para la que requerirá menos relaciones polémicas con los líderes europeos. Además, cabe recordar el valiente y grandioso paso que ha decidido dar Europa tras la salida de Reino Unido de la Unión: la conformación de una defensa y una seguridad europea más fuerte y preparada para los retos actuales, además de las cada vez mayores amenazas de distensión económica y política hacia el gigante ruso debido a su política exterior, que se aferra de momento a su alianza con China y los BRICS y a una política sectaria cada vez mayor en Oriente Medio. Puede que Rusia advierta un futuro más prometedor si permanece cerca y en buena relación con sus vecinos del oeste ante una política exterior norteamericana más dudosa y un horizonte de amenazas cada vez más común.

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It has been calculated about 9,600 deaths since 2014 in the fighting between the government forces of Kiev and the separatist rebel forces after the proclamation of the two popular republics of Donestsk and Lugansk with the resignation of the previous president, Viktor Yanukovich, and the proclamation of a government closer to Europe. The ceasefire signed in Minsk in February 2015 reduced the casualties and the deployment of heavy weapons, but it did not achieve its objective of pacifying the process due to the impossibility of compliance by Kiev and Moscow. Again, it has been tried to advance the peace process and, therefore, on 19 October the Normandy Quartet (France, Germany, Russia and Ukraine) has reunited this time in Berlin to discuss the conflict in Ukraine to find a series of measures and reach an agreement on eastern Ukraine.

The Quartet has decided to sign a «road map» before December related to the Minsk Agreements, a document which ratifies the attempt to achieve progress proposed in Belarus to address a political-military solution to the conflict in Eastern Ukraine; fundamental to face, and following a major order where security will be the main issue to solve before the political process, will be border controls, nips, accesses of the OSCE and the beginning of disarmament. The meeting has pointed out the role of the OSCE as an intermediary and a major player in this crisis (also present in the Trilateral Contact Group with Russia and Ukraine) with the ratification of the deployment of a mission of an armed police. It will also continue with the expert-level work and sub-working groups (Contact Group) for the legislative process and the implementation of the «Steinmeier formula»[6] to establish a special status in that part of the country with greater autonomy.

The result of this meeting, however, leaves something more confusing Putin’s position in the solution of the conflict in Ukraine. Putin had never been on German territory since the annexation of Crimea in 2014 and, after that, the gap between Russia and the West was fed with the German economic sanctions to Russia, leaving quite cold and dissonant relations between the two parties. But Merkel’s initiative to put the issue on the table with the key leaders involved in the Ukrainian conflict has highlighted how important it is to set aside the policy of detente, which Putin has thought much up to the point of confirming his participation in the meeting almost the day before.

Nowadays, Putin is largely influenced by what is happening in Syria and the decisions taken in relation to the issue of Ukraine and its relations with other European leaders depend on the political progress in the Syrian war. With its presence in the debate of the Ukrainian conflict- muted so far voluntarily or involuntarily- by the events in Syria, Putin may be looking for an outlet for his excess role in the Middle East to divert attention, again, to the eastern European side while the political development in Syria remains the most complex path for which it will require less contentious relations with the European leaders. Also, remembering the brave and great step that Europe has decided to take after the departure of UK from the Union: the creation of a defense and a stronger European security and prepared for today’s challenges, in addition to the increasing economic and political towards the Russian giant because of its foreign policy, which clings its alliance with China and the BRICS and to the increasing sectarian politics in the Middle East, Russia may notice a brighter future if it remains close and with good relationship with its West neighbors due to the more dubious US foreign policy and the horizon of increasingly common threats.

MARTA Gª OUTÓN

[1] https://mundo.sputniknews.com/rusia/201610221064293319-ucrania-acurdosdeminsk/

[2] http://www.dw.com/es/opini%C3%B3n-putin-parece-ceder/a-36090039

[3] http://www.teinteresa.es/mundo/Cuarteto-Normandia-diciembre-Acuerdos-Minsk_0_1672032816.html

[4] Prioridad en las elecciones locales en las zonas ocupadas de Donbass y orden especial a los gobiernos de locales de esas áreas. Introducción del procedimiento especial de auto-gobierno local.

[5] http://en.reporter-ua.ru/germany-formula-steinmeier-provides-for-a-special-procedure-of-self-government-together-with-the-local-elections.html

[6] Priority in local elections in the occupied areas of Donbass and especially local governments of those areas. Introduction of the special procedure of local self-government.